Descubre 3 características de las Fiestas Juninas de Brasil

Celebradas desde el sig. XVII, las Fiestas Juninas son una ceremonia que se realiza en todo el territorio brasileño. Según los historiadores, la fiesta es originalmente portuguesa y era un ritual de reverencia hacia los dioses paganos europeos, pero absorbió características católicas en Brasil cuando fueron incorporadas durante el período de colonización. Actualmente, las fiestas tienen una fuerte relación con los santos católicos, como San Juan, San Pedro y San Antonio.

Tradicionalmente, las festividades de junio comienzan el 12 de junio, víspera del día de San Antonio, y terminan el 29 de junio, día de San Pedro. Los días 23 y 24 se celebra el Día de San Juan.

Además del carácter católico, la celebración sufrió otros tipos de cambios, gracias a la influencia de los pueblos que habitaban Brasil en ese momento. Las comidas, bailes, rituales y decoraciones que hoy hacen parte de las Fiestas Juninas de Brasil tienen su origen en la mezcla de los pueblos portugueses, indígenas y africanos.

La fiesta hoy en día es la segunda más celebrada por los brasileños, superada solo por el Carnaval. Parece bastante importante, ¿no? ¡Conozcamos algunas de sus características!

Comidas

Si alguna vez has estado en una Fiesta Junina brasileña, seguro que has notado que la base de las comidas típicas de esta fiesta es el maíz. La tradición proviene de los portugueses, que celebraban la cosecha del trigo en el verano europeo, entre los meses de junio y septiembre. Como Brasil no es un gran productor de trigo, la planta ha sido reemplazada por el maíz y actualmente se usa en la preparación de casi todas las recetas de junio, como la pamonha, el munguzá y el curau. Estos platos pueden variar en nombre y método de preparación según la región.

El brasileño también es fanático de los pasteles y esto se nota en las festividades de junio. Pastel de maíz, pastel de fubá (una fina harina hecha con choclo molido), pastel de yuca y pastel de coco son algunos ejemplos. El coco también se usa como relleno para la tapioca, que se prepara con harina de yuca.

Decoración y rituales

Algo que no puede faltar en los “arraiais juninos” es decir, en estas fiestas del mes de junio, es la decoración, que enmarca el lugar donde se realizará la fiesta y le da el brillo que caracteriza a esta fiesta. Cada uno de los componentes de la decoración, son elementos de la cultura popular y tienen un significado para la fiesta, haciendo que la decoración sea inherente al ritual. Los globos se colocan en la entrada del lugar para indicar el inicio de la fiesta, pero originalmente se incorporó esta tradición para venerar a los santos, agradecer las bendiciones otorgadas o pedir bendiciones. Banderas de colores adornan todo el salón donde se llevará a cabo la fiesta.

La hoguera se enciende para proteger a los participantes de los espíritus malignos y para calentarlos, ya que la fiesta se celebra en junio, un mes frío. El matrimonio campestre, que es una especie de sátira de las bodas tradicionales, y una práctica escénica que requiere que los participantes tengan cierta habilidad para actuar. El novio imita a un borracho, tambaleándose y diciendo que ya no quiere casarse; pronto el padre de la novia lo obliga a casarse con la ayuda del oficial de policía de la ciudad, y luego de la ceremonia, comienza la “quadrilha”, que es un grupo de baile popular.

 

 

Bailes

La danza principal de las fiestas de junio es la “quadrilha junina”, un estilo de danza folclórica popular. Los participantes se organizan en parejas y se visten de forma característica, lo que le da a este grupo de baile folclórico, una energía única. Una persona se encarga de dictar las acciones que harán los demás mediante frases metafóricas, como «mira la serpiente». Después de escuchar esta frase, los participantes deben saltar, ¡como si realmente estuvieran esquivando una serpiente!

Otro baile popular conocido en las fiestas de junio es la “ciranda”, también de origen portuguesa. Los participantes deben hacer un círculo y bailar al ritmo de los tambores lenta y repetidamente. Aunque sea una costumbre de los brasileños bailar “ciranda” en esta celebración, el baile es considerado Patrimonio Cultural Inmaterial de Pernambuco (el estado brasileño donde se creó) y su manifestación ocurre independientemente de las fiestas juninas.

Podemos ver la importancia del multiculturalismo brasileño en los detalles que componen la fiesta, ¿cierto? En esta celebración los brasileños demuestran su fe, alegría, y mantienen viva la cultura.

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